viernes, 30 de octubre de 2020

LA INFLUENCIA DEL ESCRITOR FRANZ KAFKA EN EL PENSAMIENTO CONTEMPORÁNEO

Raúl Espinoza Aguilera, @Eiar51 La primera novela que leí de Franz Kafka fue “La Metamorfosis”. Me causó una fuerte impresión por su originalidad y su denuncia familiar. Trata de la vida de un vendedor de telas que experimenta un tremendo vacío existencial, monotonía y aburrimiento. Vive como en un laberinto amargo, oscuro y sin sentido. El personaje central se llama Gregorio Samsa. Tiene escasamente 23 años y es el único sustento económico para su familia (sus padres y una hermana). El día menos esperado despierta convertido en un gigantesco escarbajo. Gregorio se asusta y, además, no puede incorporarse de la cama. Después de muchos esfuerzos lo logra. Cuando abre la puerta de su habitación su padre Gregor se alarma y le ordena estar en su habitación para que nadie lo vea. Sólo su hermana Grete se muestra comprensiva y logra vencer el miedo para asear su habitación y darle agua y alimentación. Ante esta situación, los restantes miembros de la familia deciden comenzar a trabajar. El drama de Gregorio es que psicológicamente reaccionaba como insecto: inseguro, con fobia a la luz y se escondía debajo de los muebles. Un día se hiere el costado, deja de comer y muere. Gregorio siempre tuvo conflictos con su padre: duro, inflexible, dominante e incomprensivo. Su madre, Anna, no logra vencer el terror de ver a su hijo convertido en un gigantesco insecto. Ambos lo desprecian e ignoran. Sólo su hermana Grete lo quiere y lo comprende. Es el único consuelo del personaje central. ¿Qué mensaje deja Kafka en esta célebre novela? La brutalidad y malos tratos de su padre, que lo marca para toda la vida. Lo que ahora se denomina como “violencia intrafamiliar”. Porque el joven Kafka tenía temperamento artístico y una gran sensibilidad. Características que nunca supo comprender su padre. Esto se puede comprender más a fondo en su “Carta al padre”. Franz Kafka nació en 1883 en Praga, entonces perteneciente al Imperio Austrohúngaro y muere en Kierling, Austria en 1924. Cursó el Doctorado en Derecho. Pertenecía a una familia acomodada judía. Franz dominaba el alemán y el checo. Tuvo muchos amigos intelectuales y escritores. Entre ellos destaca, Max Brod ya que, gracias a él, sus manuscritos fueron publicados. Otras obras de Kafka son: “El Proceso”, para muchos críticos literarios considerada como su mejor novela; inspirada en su experiencia como abogado; “El Castillo”, “El Desaparecido” y numerosas cartas y relatos breves. Franz Kafka simpatizaba con el socialismo y el anarquismo. Debido a ello, los comunistas difundieron ampliamente sus obras literarias. A este autor se le considera como el precursor del Existencialismo y la novela psicológica. Despreciaba profundamente el “burocratismo” en la actividad laboral. Ahora bien, este autor tuvo una personalidad perturbada, que sufría mucho internamente, se infravaloraba constantemente. Nunca se casó ni tuvo hijos, sólo ciertos pasajeros amoríos. En su juventud leía a Flaubert, Dickens, Cervantes y Goethe. Pasados los años se convirtió en un admirador de Nietzsche, Darwin y Haeckel. Tal vez por eso se declaró ateo. A los lectores les suele presentar un mundo sombrío, sórdido, sin esperanza, pesimista, amargo, absurdo y angustioso. De ahí viene el adjetivo “kafkiano”. La obra de Kafka tuvo un gran impacto en escritores y filósofos existencialistas como Albert Camus y Jean-Paul Sartre. Su desbordante imaginación tan fantasiosa y, a la vez, realista, influyeron claramente en el “realismo mágico” de Gabriel García Márquez y en Jorge Luis Borges. Este literato siempre se quejó de experimentar una tremenda soledad y desamparo. Sufría de frecuentes insomnios y de temer pesadillas horrendas. Algunos psiquiatras afirman que pudo haber tenido un “trastorno esquizoide de la personalidad”. En 1923 contrajo una pulmonía que posteriormente evolucionó en una tuberculosis (en esa época era una enfermedad incurable y mortal), El 3 de junio de 1924 falleció a los 40 años. Resulta sorprendente la gran influencia que ha tenido Franz Kafka en el pensamiento contemporáneo y en destacados pensadores y escritores. Se podría afirmar que fue el iniciador de la “Literatura del Absurdo”.

ERRADICAR NUEVAS FORMAS DE ESCLAVITUD

Pbro. José Martínez Colín articulosdog@gmail.com 1) Para saber Aunque la esclavitud está oficialmente prohibida, sin embargo sigue existiendo. Según un estudio publicado en el año 2000 podría haber unos 27 millones de esclavos en el mundo. Según el Departamento de Estado de EUA, en la actualidad existen entre 90.000 y 300.000 personas esclavas en Sudán; también la hay en la India y Mauritania. Estos esclavos, hoy por hoy, son comprados y vendidos en unos mercados. En 1989, se podía comprar a una mujer o un niño en unos 90 dólares, luego su precio cayó hasta los 15 dólares. Se les obliga a cambiar su religión y a convertirse al Islam, se les cambian sus nombres por otros nombres árabes y son forzados a hablar una lengua que no conocen. Por ello, el Papa Francisco en su reciente Encíclica “Fratelli Tutti” señala la esclavitud, en cualquiera de sus formas, como un flagelo que impide la fraternidad universal. Señala que en la raíz de la esclavitud se encuentra una concepción errónea de la persona humana que admite ser tratada como un objeto. El cristianismo viene a mostrar que la persona tiene una gran dignidad: la de ser hijos de Dios. 2) Para pensar Emy era una linda niña de 5 años de edad. Vivía en los Estados Unidos de América. Su familia era muy cristiana. Ella amaba a su familia y admiraba los ojos azules de su padre, de su madre y de sus hermanos. Todos tenían ojos azules, menos ella. El sueño de Emy era tener ojos azules. Una noche, antes de dormir, le pidió a Dios que cuando se despertara, tuviera ojos azules. Al despertar, corrió al espejo, miró y... sus ojos continuaban siendo color castaño muy oscuro. Se entristeció y lloró. Se preguntaba: “¿Acaso Dios no me oyó?” Aunque renegó y no entendía, acabó por aceptarlo, confiando en Dios. Emy siguió rezando y era muy generosa. Años después, la invitaron a ir como misionera a la India y aceptó encantada. En la India había un mercado donde se vendían niños, y Emy se encargaría de entrar disfrazada, vestida como las mujeres del lugar, a ese lugar y comprar niños para salvarlos. Un día, una amiga misionera la miró disfrazada y dijo: “¡Emy! Estás perfecta, ¿ya pensaste que no podrías disfrazarte si tuvieses ojos azules como los de tu familia? ¡No cabe duda que Dios ha pensado en todo! Él te dio ojos oscuros, para que salvaras muchos niños.” Esa amiga no sabía cuánto lloró Emy por no tener ojos azules... Ahora Emy pudo entenderlo y le dio alegremente gracias a Dios por no tener ojos azules. Todo está en el plan de Dios. Él conoce cada oración que rezamos. No podemos perder la paz si no nos gusta el color de nuestros ojos o cualquier otra cosa. Solo hay que confiar plenamente en Él. 3) Para vivir Existe una organización humanitaria “Christian Solidarity International” que se dedica a comprar esclavos para liberarlos, pagando 50 dólares por cada uno. Es necesario cuidar que las redes criminales, con las tecnologías informáticas, no engañen a jóvenes y niños. La dignidad de la persona humana, al ser creada a imagen y semejanza de Dios, no permite ser propiedad de otro, ni ser tratada como un medio para obtener beneficios. El Papa Francisco demanda luchar por erradicar la trata de personas y otras formas de esclavitud.

martes, 27 de octubre de 2020

EL PAPA FRANCISCO Y LOS HOMOSEXUALES

P. Mario Arroyo, Dr. en Filosofía. p.marioa@gmail.com En el documental entrevista “Francisco” dirigido por Evgeny Afineevsky, el Papa afirmó: “Lo que tenemos que hacer es una ley de convivencia civil. Tienen derecho a estar cubiertos legalmente”. Después, las redes estallaron. Lo volvió a hacer Francisco, tiene el don de ser el centro del huracán. En estas breves líneas intentaré sintetizar los límites y alcances de la referencia papal, en atención al contexto en que lo dijo y la doctrina magisterial precedente. Francisco habla del tema respondiendo a una pregunta sobre si está bien llevar a los hijos de parejas homosexuales al catecismo. Dice que tienen derecho a tener una familia y que no deben ser echados de la misma por su condición. Lo dice en un documental, lo que propiamente hablando no es magisterio oficial de la Iglesia, pero sí expresa, indudablemente, la mente del Pontífice. ¿Qué quiere decir esto? Que su intención no es modificar la doctrina, sino interpretarla, matizando los alcances de algunas afirmaciones. ¿Qué dice la doctrina? Lo de siempre, que no ha cambiado. Dos referencias son particularmente importantes, quizá para algunos incómodas: Catecismo 2357: “los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados… Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso.” Más reciente, durante el pontificado de Francisco, tenemos Amoris laetitia 251: “no existe ningún fundamento para asimilar o establecer analogías, ni siquiera remotas, entre las uniones homosexuales y el designio de Dios sobre el matrimonio y la familia”. Es decir, dicho mal y pronto, la Iglesia Católica, y Francisco con ella, siguen considerando los actos (esta última palabra es importante) homosexuales como un pecado. Siguen afirmando que el matrimonio es exclusivo entre el hombre y la mujer, siendo contrario el matrimonio homosexual al designio de Dios. ¿Qué es entonces lo que matiza Francisco? Dos documentos de la Congregación para la Doctrina de la Fe, aprobados por San Juan Pablo II cuando Joseph Ratzinger era Prefecto. La Nota doctrinal sobre algunas cuestiones relativas al compromiso y la conducta de los católicos en la vida política, del 2002 y Consideraciones acerca de los proyectos de reconocimiento legal de las uniones entre personas homosexuales, del 2003. Quiero subrayar la palabra “matiza”, es decir, propiamente hablando no cambia lo que ahí se dice, sino lo interpreta. En el primer texto dice: “la conciencia cristiana bien formada no permite a nadie favorecer con el propio voto la realización de un programa político o la aprobación de una ley particular que contengan propuestas alternativas o contrarias a los contenidos fundamentales de la fe y la moral… A la familia no pueden ser jurídicamente equiparadas otras formas de convivencia, ni éstas pueden recibir, en cuánto tales, reconocimiento legal”. Mientras que en el segundo afirma: “Ante el reconocimiento legal de las uniones homosexuales, o la equiparación legal de éstas al matrimonio con acceso a los derechos propios del mismo, es necesario oponerse en forma clara e incisiva… el respeto hacia las personas homosexuales no puede en modo alguno llevar a la aprobación del comportamiento homosexual ni a la legalización de las uniones homosexuales”. Es decir, como legislador supremo de la Iglesia, interpreta que ese texto se refiere exclusivamente al matrimonio homosexual, no a “una ley de convivencia civil”. ¿Es lo mismo que “unión civil”? Pienso que sí. De fondo, ¿qué es lo que está haciendo Francisco? Ha dado un paso más en lo que se refiere al valor de la secularidad en la Iglesia y a la laicidad del estado. Para entenderlo, es preciso distinguir entre ética personal y ética política. No ha cambiado la percepción del acto homosexual como pecaminoso –ética personal-, pero sí ha dado un paso decidido en orden a reafirmar la legítima autonomía del estado en orden a sus fines (la paz, la justicia, el bien común), y con ello a la laicidad (ética política). El estado no me puede impedir tener “malos pensamientos” (asunto personal), y puede regular la prostitución o el consumo de marihuana (aunque sean prácticas inmorales). En este caso, se limita a reconocer que existen parejas del mismo sexo y a proponer una regulación que no las deje desprotegidas, por ejemplo, para temas de herencia, impuestos, visitas y decisiones médicas. El estado no se pronuncia acerca de la moralidad o no de estas costumbres, porque no es su función. En documentos anteriores se recomendaba regular exprofeso esas leyes, ahora propone una “ley de convivencia civil”.

domingo, 25 de octubre de 2020

"FRATELLI TUTTI": ¿QUÉ ES LA DECONSTRUCCIÓN?

Pbro. José Martínez Colín, articulosdog@gmail.com 1) Para saber En este mes de octubre, en la Víspera de la fiesta de San Francisco de Asís, el Papa dio a conocer su tercera encíclica precisamente en la ciudad de Asís. La quiso titular con una frase que utilizaba el santo para dirigirse a todos los hermanos y las hermanas: «Fratelli tutti», “Todos los hermanos”. El Papa le tiene especial devoción a este santo, tanto es así que eligió el nombre de Francisco en honor a él. El Papa Francisco escribió esta Encíclica para invitarnos a amar más allá de las barreras de la geografía y del espacio, para profundizar en lo esencial de una fraternidad abierta, de tal manera que nos permita reconocer, valorar y amar a cada persona más allá de su cercanía física. Así, dedica esta nueva encíclica a la fraternidad y a la amistad social. San Francisco, que se sentía hermano del sol, del mar y del viento, se sabía todavía más unido a los que eran de su propia carne; sembró paz por todas partes y caminó cerca de los pobres, de los abandonados, de los enfermos, de los descartados, de los últimos. 2) Para pensar El Papa nos el deconstruccionismo. Es un término complejo, pero que lleva a maniadvierte de un peligro actual que afecta a la fraternidad:pular las sociedades. Es un peligro que nos conduce a un consumismo y a un individualismo. Observa el Papa que cuando una persona se olvida de la historia, del bagaje cultural que lo acompaña, de las tradiciones, es fácilmente manipulable. Perder el sentido de la historia lleva a la disgregación. Hoy en día va invadiendo una especie de deconstruccionismo donde se olvida de la historia y se pretende un “borrón y cuenta nueva” para comenzar de cero. Esa “deconstrucción” quita de significado a conceptos fundamentales con los que se ha construido toda una cultura. Por ejemplo, los conceptos de familia, matrimonio, derecho, justicia, hombre, mujer, sexo, amor, libertad, Dios, espíritu, etc. Se pretende quitarles su verdadero significado para ponerlo otro, aunque éste fuese caprichoso y así poder usarlo para provecho propio y justificar cualquier acción. Pero sin historia, sin experiencias, sin la riqueza espiritual y humana que se ha transmitido a lo largo de las generaciones, dice el Papa, la persona se queda vacía, desarraigada. Así funcionan las ideologías de distintos colores, que destruyen, o de-construyen, todo lo que sea diferente y de ese modo pueden reinar sin oposiciones. Es una nueva forma de colonización cultural. 3) Para vivir Para detener el peligro del deconstruccionismo es preciso defender las raíces verdaderas sobre las que se ha desarrollado la cultura cristiana y no encerrarse en una ideología falsa. Eso no lleva a estar abiertos y soñar con una única humanidad en la verdad, en que todos nos amemos: “es un secreto para soñar y hacer de nuestra vida una hermosa aventura”, dice el Papa Francisco. Si reconocemos la dignidad de cada persona humana, podamos hacer renacer entre todos un deseo mundial de hermandad. Saber que nadie puede pelear la vida aisladamente, siempre se necesita una comunidad que nos sostenga y en la que nos ayudemos unos a otros a mirar hacia delante. ¡Qué importante es soñar juntos!, concluye el Papa.

martes, 20 de octubre de 2020

¿QUÉ ES LA UNIDAD DE VIDA?

Raúl Espinoza Aguilera, @Eiar51 Recuerdo aquel inolvidable sismo del jueves 19 de septiembre de 1985 en que la CDMX resultó seriamente afectada porque muchas edificaciones se colapsaron. Es decir, las estructuras no resistieron la magnitud de aquel terremoto de 8.1 y las estructuras se fracturaron y muchos edificios se vinieron abajo. A mí me sorprendió en un octavo piso de la colonia Polanco, los cimientos crujían y algunos cristales se rompieron. Pero, por fortuna, no pasó a mayores. Mi oficina de prensa se encontraba en la calle Viena, en la Zona Rosa. Hacia el mediodía, la dueña del inmueble me llamó para decirme que por favor sacáramos objetos de valor como la fotocopiadora, archiveros, máquinas de escribir ya que se había caído toda una pared lateral y probablemente sería saqueada en poco tiempo. A primera hora de la tarde fui a recoger esos instrumentos de trabajo y en las edificaciones de alrededor el espectáculo era dantesco. Recorrí algunas cuadras y me encontré a la actriz María Félix llorando desconsoladamente, dentro de un convertible blanco, porque su edificio se había aplastado “como un acordeón”. Y así muchos otros en algunas colonias circundantes, como la Roma, la Condesa, la Cuauhtémoc, etc. En cambio, otros edificios soportaron el embate del temblor y prácticamente no sufrieron daños. Pensaba que éste es un buen ejemplo para explicar la unidad de vida. Me refiero a que para conseguir la plena madurez de la personalidad humana se requiere ser coherente o congruente con los propios principios o metas de vida. En todos los ámbitos: en la vida familiar, en el trabajo, en las relaciones sociales, etc. Dan pena esas personas que en una iglesia o con su familia se comportan de una manera y, con sus amigos, al calor de las copas, realizan actos de los que luego se arrepienten, o bien, en el medio laboral a sus subalternos los tratan mal, les retrasan su salario o no viven la justicia social. Este importante valor nos habla de que mujeres y hombres –sean adolescentes o mayores-, se encuentren solos o acompañados, mantengan sus principios vitales y tengan la valentía de decirles a quienes los pretenden arrastrar por otros equivocados caminos: “Esto que me proponen no va de acuerdo con mis convicciones”. Es decir, sin importar en absoluto el qué dirán ni los respetos humanos. Un ejemplo concreto es la fidelidad conyugal. Es relativamente fácil ser infiel sin que la esposa –de momento- se entere, pero todo en esta vida se acaba sabiendo. Se trata de perseverar en el amor a la mujer a la que un día se prometió entregar la vida entera y a los hijos que se han procreado. En otro sector no menos importante, en el trabajo profesional de debe de vivir la honradez, la eficacia, el realizar el quehacer profesional bien hecho, con sentido profesional, sin presentarlo defectuoso o de manera tramposa porque tarde o temprano el jefe se enterará y no vendrán las esperadas promociones dentro del mismo trabajo, los aumentos de sueldo, etc. En cambio, cuando alguien tiene prestigio profesional se le suele invitar a laborar en otros trabajos mejor remunerados, incluso en corporativos de empresas multinacionales. Algo semejante ocurre en las relaciones sociales con ocasión de amistad o del trato con colegas de la empresa. En la milicia se suele escuchar un dicho para referirse a una persona congruente, con principios bien determinados, y que no se dejan llevar ante el ofrecimiento de actos de corrupción y se suele decir: “Este es un hombre de una sola pieza”. Dicho en otras palabras, que no se “quiebran” ante “cañonazos de $50,000 pesos”, como en los años veinte solía decir el General Álvaro Obregón. A este tipo de personas “de una sola pieza” se le suelen confiar puestos de alta responsabilidad, en los que se deposita información confidencial y se requiere que sean personas probadas, con criterio y prudentes. Me vienen a la mente personalidades del mundo de las Letras que resistieron a los embates del marxismo-leninismo, como: Aleksandr Solzhenitsyn quien por sus ideas contrarias al totalitarismo de izquierda fue enviado por varios años a una temida cárcel en Siberia. Sufrió toda clase de privaciones: frío, malos tratos, poquísima alimentación y todo tipo de vejaciones, pero al final permaneció fiel a sus principios y en 1970 se le concedió el Premio Nobel de Literatura, después de enviar sus obras través de amigos comunes y, una vez publicadas, sus obras fueron aclamadas por la crítica mundial en los países occidentales. Otro caso muy conocido es el del escritor cubano, Armando Valladares, quien por su oposición al régimen de Fidel Castro pasó 22 años en prisión. Entre sus obras más conocidas, se encuentra: “Contra toda Esperanza” en la que nos muestra a un intelectual decidido a no ceder en sus convicciones, aunque pasara el resto de sus días en prisión. La pregunta final es, ¿de dónde han sacado fuerza moral estas celebridades? De sus principios sólidos y firmemente arraigados porque el amor a la verdad –en estos casos- ha sido más poderoso que las amenazas de muerte.

QUEMA DE IGLESIAS

P. Mario Arroyo, Doctor en Filosofía. p.marioa@gmail.com Realmente sorprendentes y dolorosas son las imágenes que muestran a las Iglesias de la Asunción y San Francisco de Borja en llamas, en el centro de Santiago. Representan la materialización del odio y la sinrazón, así como el oportunismo cobarde de facciones radicales, que buscan polarizar la opinión pública incitando al odio y la violencia. Uno se pregunta, ¿qué tiene que ver la quema de iglesias con el aniversario de las manifestaciones masivas en Chile? ¿Qué relación existe entre la destrucción de monumentos religiosos y el plebiscito para elaborar o no una nueva constitución? La respuesta es clara, nada. El mal es irracional, la violencia absurda. No hay que buscar una justificación racional de los hechos, pues representan la embriaguez del absurdo. ¿Para qué? Para infundir miedo en la sociedad y, si es posible, tomar arteramente el control de la misma. ¿Qué debo hacer si soy minoría para conseguir poder político? Crear caos y miedo, porque entonces la gente se deja arrastrar por sus emociones, no tiene tiempo para pensar fríamente, de forma que lo imposible puede hacerse realidad. Ahora bien, como cristianos y como ciudadanos estamos indignados. No hace falta que seamos chilenos para estarlo, pues se pisotean nuestros sentimientos religiosos con ocasión de su cuestionable protesta política. Como católicos no podemos responder con la misma moneda, pues resultaría más anticristiano que la misma quema de iglesias. No podemos contribuir a alimentar la espiral del odio y la violencia. “No comprendo la violencia: no me parece apta ni para convencer ni para vencer; el error se supera con la oración, con la gracia de Dios, con el estudio; nunca con la fuerza, siempre con la caridad”, diría oportunamente San Josemaría. Pero tampoco podemos quedarnos parados, sin hacer nada, simplemente lamentándonos de los tristes hechos. No podemos ser cómplices pasivos de “los bárbaros”, pues “el que calla otorga”, y como ciudadanos no podemos resignarnos a que la barbarie sustituya siglos de civilización, cultura y convivencia. Como sociedad democrática deberíamos hacer posible la manifestación política pacífica y civilizada, de forma que exista la posibilidad real de castigar y controlar a los revoltosos oportunistas que impunemente violan el estado de derecho. No podemos, simplemente, ver cómo desaparece la civilización por obra de unos desarrapados audaces. El problema es que los radicales excluyen expresamente el diálogo racional. La razón juega en su contra y lo saben. Por ello, la alternativa es doble. Primeramente, las personas de fe tendrían que tener el valor de salir a defender sus templos, los ciudadanos en general sus monumentos. En segundo lugar, la sociedad civil debe exigir al estado que sea capaz de mantener el orden público, la paz, la seguridad. Porque no es justa la quema de iglesias, ni el saqueo de negocios, ni vandalizar monumentos o la infraestructura pública. La violencia es ilegítima en el estado de derecho, descalifica la causa que la motiva y pone en peligro a la sociedad y sus instituciones. Como sociedad, como ciudadanos, no podemos dejarnos secuestrar masivamente por un grupo minoritario de radicales exaltados. La misión de la Iglesia es sobrenatural, está por encima de ideologías políticas y sociales. Su tarea es hacer posible la comunión con Dios y entre los hombres, hacer posible la fraternidad social, de forma que podamos ir del brazo con quien piensa distinto de nosotros. La Iglesia es un misterio de comunión, busca crear unidad ahí donde solo hay división. La Iglesia chilena tiene ahora un gran desafío, pero la Iglesia no es solo ni principalmente la jerarquía; la Iglesia es cada uno de los bautizados, y ellos son los responsables de restañar las heridas de la división y de encontrar el camino del diálogo. A los demás no nos queda sino manifestar nuestro dolor y nuestra inconformidad por los tristes eventos, mientras brindamos el apoyo de nuestra oración: por los fanáticos radicales que canalizan su odio hacia los monumentos religiosos, así como por los cristianos y ciudadanos responsables que buscan fomentar la unidad, el diálogo y hacer frente a la enconada división que enfrenta la sociedad chilena, y que ha encontrado su chivo expiatorio en las iglesias.

LA UTOPÍA DEL PAPA FRANCISCO

P. Mario Arroyo, Dr. en Filosofía p.marioa@gmail.com La víspera del día de San Francisco, el 3 de octubre, Francisco firmó su tercera encíclica, Fratelli Tutti, que algunos han considerado como “el Testamento de Francisco”. En ella se agrupan, en forma ordenada, muchos de los grandes temas del Papa argentino, de forma que no resulta pretencioso afirmarlo, en cierta forma condensa en ese texto su legado a la Iglesia y a la humanidad. La encíclica expresa el sueño de Francisco, los sueños de un Papa con una humanidad unida y fraterna, en paz, donde haya lugar para todos, particularmente los excluidos, los olvidados, los pobres. El legado de Francisco propone una fraternidad universal. Todos somos hermanos. Todos somos responsables de los demás. Todos unidos. Por eso puede parecer ideal y en cierta manera utópico, al encontrarnos en un mundo surcado por enconadas divisiones. Sin embargo, puede considerarse “Utopía”, no en el sentido peyorativo, sino en su más genuina expresión humanista, en la saga humanista y cristiana de Santo Tomás Moro, quien acuñó el término. El texto papal ofrece una aguda y dura crítica a la sociedad actual, con la esperanza de construir una humanidad mejor. Contiene en sí mismo los clásicos elementos de la literatura utópica, pues aúna el optimismo antropológico, propio del humanismo cristiano, con el pesimismo sociológico respecto a la sociedad actual. Francisco presenta una acerba crítica de las formas perniciosas en las que se ha estructurado la vida en el mundo contemporáneo, particularmente en los ámbitos de la economía y la política. Su principal antagonista es el individualismo egoísta de nuestra sociedad. “Parece una utopía ingenua, pero no podemos renunciar a este altísimo objetivo” reconoce el Papa. ¿Utopía irrealizable? En realidad, no debería ser así. Lo que señala no es imposible, por lo menos teóricamente, idealmente. Quizá Francisco es un visionario que desenmascara con agudeza el agotamiento de las instituciones políticas y económicas vigentes, vislumbrando un cambio epocal, un nuevo paradigma de organización social, acorde con la dignidad humana y con su originario carácter social. En un mundo en crisis, con instituciones agotadas, alguien debe señalar el camino. De hecho, su texto está plagado de propuestas concretas, para las que en teoría no existe un obstáculo o impedimento insuperable. Sin embargo, es dudoso que tengamos el valor, el coraje y la determinación de llevarlas a la práctica. Por ejemplo, sugiere dedicar el dinero que se gasta en armamento para crear un Fondo que permita acabar de una vez y para siempre con el hambre en el mundo. Es lógico, es concreto, es factible, ¿nos atreveremos a hacerlo? ¿Por qué no? ¿Obstáculos? La teología católica señala uno ineludible: el pecado original. La inclinación al mal que anida en lo más profundo del ser humano y de la que nunca nos podemos desembarazar definitivamente, por lo menos en esta vida. Se trata del mal enrocado en lo más profundo del corazón humano. Idealmente todas estas propuestas podrían ser verdad en una sociedad de niños, carentes de malicia. Pero en un mundo de hombres heridos, no solo por la maldad externa y por las estructuras de pecado, sino por el mal que actúa en su propio corazón, su implantación es problemática. Supondría un fair play por parte de todos, una confianza básica en que los demás seguirán la misma lógica de comunión y de paz. El miedo y la desconfianza serían los principales obstáculos. ¿Somos capaces de superarlos? ¿Por qué no? Ahora bien, Francisco va por delante, no se queda en la bella teoría, sino que muestra cómo, poco a poco, puede convertirse en realidad. La misma génesis del documento es una muestra de ello, pues supone un nuevo paradigma en las relaciones de la Iglesia con el islam, que bien puede servir como punto de referencia real para una progresiva reforma de las relaciones en la sociedad. No duda en afirmar que gran parte de su inspiración viene del diálogo con el Gran Imán de Al-Azhar, Ahmad Al-Tayyeb, líder del islam sunita, quien no dudó en afirmar que el texto de Francisco “devuelve la conciencia a la humanidad.” ¿Hubiéramos imaginado esta cordial relación entre católicos y musulmanes al más alto nivel hace 50 años? ¿Qué nos impide soñar con una sociedad más humana y más justa?

miércoles, 14 de octubre de 2020

LOS HÉROES DEL CORONAVIRUS

Raúl Espinoza Aguilera @Eiar51 En medio de la actual pandemia en que han fallecido cientos y cientos de personas en muchos países, y muchos otros se encuentran bastante graves de salud, han surgido verdaderos héroes o heroínas que han puesto en riesgo sus vidas por atender a los que sufren de esta severa enfermedad. Hay casos verdaderamente admirables de médicos, sacerdotes y enfermeras que han dado su vida generosamente por salvar a los pacientes. Ahora mismo recuerdo el caso de unas enfermeras que se iban bajando de una ambulancia con un enfermo de Covid, en situación ya muy delicada, y un reportero de la televisión les preguntó que cómo se sentían. Una de ellas tomó la palabra y comentó: – “Llevamos una semana trabajando tanto de día como de noche. A menudo no nos da tiempo de desayunar ni de comer. Pero comprendemos que es un urgente deber nuestro el salvar vidas humanas”. Muchos otros médicos comentan lo mismo. Incluso llegan a añadir que no le tienen miedo a la muerte. Que lo importante es el bien de sus pacientes; que para eso estudiaron la Carrera de Medicina y es su obligación como galenos. “Es nuestra misión”, manifiestan. El caso de Juan Ramón Pero también en el ámbito familiar han ocurrido hechos ejemplares. Mi amigo Juan Ramón, en un principio, no le dio mucha importancia a esta pandemia. Continuaba viajando, teniendo sus reuniones de trabajo, yendo a restaurantes con sus clientes, etc… Hasta que un día amaneció con mucho agotamiento físico y mental, dolores musculares, cuerpo cortado, fuertes jaquecas, molestias en las articulaciones. En un principio pensó que se trataba de una gripe normal, pero luego comenzó con mucha tos, sentía que se ahogaba y comenzó a escupir sangre. Su esposa le explicó al médico de cabecera la situación de Juan Ramón. De inmediato, éste expuso su situación a otro médico Neumólogo y no dudaron que se trataba del coronavirus. Su esposa lo subió al coche como pudo (porque él pesa muchos más kilos que ella) y se lo llevó hasta el hospital ese mismo día por la tarde. Ahí lo esperaban otros doctores y enfermeras. Cuando arribó, su situación fue empeorando rápidamente. Al llegar a su habitación le colocaron un respirador con oxígeno. Juan Ramón me comentó que toda esa noche no pudo dormir porque tenía la sensación que “sus pulmones se quemaban”, según me relató. Así continuó por varios días y continuaba su proceso de debilitamiento general hasta el punto que un día se despidió de su familia –a distancia, como es obvio– porque le parecía que ya no amanecería al día siguiente. Pero paulatinamente se fue recuperando y estuvo alrededor de un mes con oxígeno y medicamentos en su casa, con los atentos cuidados de su mujer y sus hijos. Ella también dio positivo en esta enfermedad, pero su caso no fue tan severo como el de Juan Ramón. El caso del Padre Agustín También es enorme la cantidad de sacerdotes que han muerto en hospitales atendiendo a pacientes del Covid tanto en América Latina como en Europa. y muchas otras naciones. Recuerdo el caso de un presbítero, el Padre Agustín, muy simpático que les contaba chistes y anécdotas divertidas a los que la estaban pasando muy mal. En cierta ocasión, se topó con un paciente ateo, que le dijo: – Yo de “curitas” no quiero saber nada. ¡Bastante fastidio es llevar esta enfermedad tan dolorosa! Pero en el pasillo se encontraba su hija y le preguntó: – ¿Qué cosa le gusta a tu papá? Ella le respondió: – La música de Andalucía. Y como el Padre Agustín sabía tocar la guitarra y cantar esa música flamenca, entró en su habitación cantando ese tipo de canciones. Y desde entonces este señor, ya entrado en años, cambió radicalmente de actitud. Y así continuó haciendo muchas amistades y brindando palabras de esperanza y aliento para con todos. En varias ocasiones, algunos médicos y enfermeras le comentaron: – Padre, usted ya ha hecho mucho por ellos y, además, es mayor de edad. ¿Por qué no se retira a su parroquia y mejor reza por ellos? Y él contestaba con seguridad y aplomo: – Porque considero que mi deber es estar con los que más me necesitan. Si me enfermo del Covid, lo dejo en las manos de Dios. Y así fue, poco tiempo después, se puso grave y falleció. A su funeral asistieron doctores, enfermeras y personal sanitario, dejando una huella imborrable entre sus pacientes y amigos. … Y muchísimos otros casos admirables Casos no menos admirables son las personas que reúnen medicamentos y alimentos, o bien, que dan generosos donativos para los enfermos de esta pandemia. Hemos vivido casos ejemplares de actitudes solidarias y fraternas, que son dignas de imitación. Como dice el dicho: “Siempre se puede sacar bien del mal aparente”.

DON MANUEL ÁVILA CAMACHO: UN PRESIDENTE RECONCILIADOR DE LA UNIDAD NACIONAL

Raúl Espinoza Aguilera @Eiar51 La Revolución Mexicana (1910-1920) trajo al país mucha inestabilidad política, económica y social. Venustiano Carranza, Emiliano Zapata y Francisco Villa asolaban a la Nación de modo violento y cruento. Hubo muchos gobiernos que duraron poco tiempo y pronto caían y sucedían otros y otros. La moneda se devaluó hasta niveles increíbles. Las industrias estaban paradas, lo mismo que las obras públicas. La agricultura, detenida y el ganado a menudo era robado. Ante tal situación de anarquía y caos, muchas familias de la capital optaron por trasladarse a vivir a pueblos más tranquilos. Recuerdo que mi abuelo paterno, Wenceslao Espinosa de los Monteros, casado con Josefa Aizpuru, con quien procreó una familia numerosa, se estableció en el mineral de “Agua Caliente”, municipio de Tamazula, Durango, desde finales del siglo XIX. Tenía ganado, una huerta, terrenos agrícolas y la explotación de la mina. Al estallar la Revolución no pensó que iba a afectar a ese apartado lugar en plena sierra. Pero un día los pobladores le vinieron a avisar que Pancho Villa lo andaba buscando para matarlo. Le sugirieron que él y su familia huyeran a un sitio más seguro. En efecto, al día siguiente, llegaron parte de las tropas de Villa y quemaron prácticamente todo, hasta su casa y una pequeña iglesia que había construido. Don Wenceslao esperó prudentemente hasta asegurarse que el peligro había pasado. Bajó de nuevo al mineral y reconstruyó casi todo. Pasaron alrededor de dos años y los pobladores le fueron a avisar que otra vez andaba Villa asolando poblados y que se dirigía hacia “Agua Caliente”. Preocupado mi abuelo decidió viajar hasta Culiacán, Sinaloa. Allá se enteró que su propiedad no había quedado nada aprovechable y ya no regresó. Este es un pequeño “botón de muestra” de lo que ocurrió con muchos ciudadanos. Y se fueron a radicar a otras poblaciones a comenzar desde cero. Con la elección de Álvaro Obregón como presidente, en 1920, la violencia se fue calmando. Pero los levantamientos militares eran continuos y hubo que apaciguarlos, porque dichos generales querían la silla del poder presidencial. Con los siguientes presidentes como Plutarco Elías Calles, Pascual Ortiz Rubio, Emilio Portes Gil, Abelardo L. Rodríguez continuaron los levantamientos militares y tuvieron que reprimirlos en forma violenta. No obstante que Elías Calles se había autonombrado como el “Jefe Máximo”, la agitación social y política continuaba. Hacia los años treinta, que designado el general Lázaro Cárdenas como presidente de 1934 a 1940. Continuó la persecución religiosa, el populismo; se pensó ciegamente que la solución agraria se encontraba en repartir miles de tierras a los ejidatarios, pero fue un tremendo fracaso. Se declaró que la educación en las escuelas era socialista, laica y atea, lo cual generó un gran descontento social. Finalmente, en 1940 hasta 1946, la balanza se inclinó por un hombre conciliador como presidente, el general Manuel Ávila Camacho. Desde los inicios de su gestión se declaró “creyente” y eso calmó los ánimos. También hizo modificaciones a la Ley de educación y retiró los adjetivos de “socialista y atea” y permitió que fueran reconocidos los colegios católicos en todo el país. Se permitió abiertamente la libertad de culto. Y fue denominado como el “Presidente Caballero”. Su principal labor consistió en recuperar la paz social, impulsar a la industria, apoyar a las empresas, lograr la confianza ciudadana. Prácticamente canceló los repartos agrarios al observar el fracaso mencionado y se dedicó a impulsar a los pequeños agricultores, otorgándoles un documento que garantizara la inafectabilidad de sus terrenos. En medio de esto, le tocó el estallido de la Segunda Guerra Mundial y debido a que submarinos alemanes hundieron a dos buques mexicanos declaró la guerra al Eje Berlín-Roma-Tokio. Con esta medida se ganó la simpatía de las fuerzas aliadas. Desde el punto de vista económico, esta Guerra Mundial benefició a la economía de nuestro país ya que Estados Unidos compraba prácticamente todo lo que la Nación producía: alimentos, algodón, diversas semillas y otras manufacturas. Vino una era de aceleramiento de la economía y pacificación nacional. Los ciudadanos cerraron filas en torno al Primer Mandatario al declarar la guerra al Eje. Las fuerzas aéreas participaron activamente, al lado de Estados Unidos, enviando el Escuadrón 201 para liberar la isla de Luzón, Filipinas y atacando también otras posiciones japonesas. Quizá uno de los hechos más admirados hacia el presidente Ávila Camacho fue que logró la reconciliación de los expresidentes. El antecedente fue que el general Lázaro Cárdenas, en 1936, ordenó la expulsión inmediata del país de Plutarco Elías Calles. Y éste quedó bastante resentido y quería la venganza. En un suceso sin precedentes, fue que Ávila Camacho desde el balcón de Palacio Nacional, ante la presencia de Plutarco Elías Calles, Pascual Ortiz Rubio, Emilio Portes Gil, Abelardo L. Rodríguez y Lázaro Cárdenas, leyó un histórico discurso convocando a la reconciliación nacional, ante una gran multitud ahí reunida. Los exmandatarios hicieron las paces (al menos externamente). También, días después aprovechó para dictaminar que ya no hubiese militares involucrados en la política, sino que fuera dominio de civiles. Así fue como el siguiente presidente fue un abogado, el Licenciado Miguel Alemán Valdés. Y desde ese año 1946 a 1952, ya no hubo más militares que quisieran dar golpes de estado. Fue un modo inteligente de erradicar la violencia e impulsar el desarrollo y el progreso del país. Pienso que a Don Manuel Ávila Camacho los mexicanos le debemos más de lo que a simple vista parece. Nunca quiso ser un hombre ególatra ni protagónico, sino que fue el mandatario que se necesitaba: reconciliador, pacífico, visionario, sereno, sencillo, ecuánime y equilibrado. Su labor como gobernante –en tan sólo seis años– cambió de forma importante el destino de nuestra Patria.

lunes, 12 de octubre de 2020

UN SUEÑO REVELADOR QUE LE SUCEDIÓ A SAN JERÓNIMO

Pbro. José Martínez Colín, articulosdog@gmail.com 1) Para saber En ocasiones los sueños pueden significar algo más que una fantasía. Eso le sucedió a San Jerónimo cuando era joven. Sucede que era muy aficionado a la lectura de grandes escritores profanos en latín especialmente de Cicerón, aunque también admiraba a Virgilio y Plauto. Eso hacía que los escritos de la Biblia en latín no le atrajeran. Pero en una ocasión recibió una gracia especial. Jerónimo soñó que era transportado al tribunal de Dios, que le preguntó con gran severidad quién era. Jerónimo respondió: “Soy cristiano”. Pero el soberano juez le replicó: “Mientes. Tú no eres cristiano, eres ciceroniano, porque donde está tu tesoro, allí está tu corazón”, y enseguida dio una orden para que lo azotasen. El mismo santo escribía después a su amigo Eustoquio: “Comprendí muy bien al despertar que aquello había sido más que un sueño, pues aún llevaba marcadas en mis espaldas los golpes del látigo que había recibido. Desde aquellas fechas comencé a leer las Santas Escrituras con más entusiasmo que el que había puesto en la lectura de autores profanos”. El 30 de septiembre la Iglesia conmemora a San Jerónimo. Este año se conmemoró el 16º Centenario de la muerte de este santo. Con ese motivo el Papa Francisco escribió la Carta Apostólica “Sacrae Scripturae affectus” (“Amor a la Sagrada Escritura”) referida a san Jerónimo para fomentar el amor a la Biblia por parte de los fieles. En la Carta, el Papa Francisco describe que este santo ha dejado a la Iglesia como herencia una estima por la Sagrada Escritura, un amor vivo y suave por la Palabra de Dios escrita. El Papa destaca su admirable figura en la historia de la Iglesia y su gran amor por Cristo. 2) Para pensar Juan Jacobo Rousseau fue escritor y filósofo, entre otras ocupaciones. No se destacaba por su fe, ni por su religiosidad. No obstante reconocía el valor de la Sagrada Escritura como lo dejó escrito: “¿Cómo rehusar el testimonio de un libro escrito por testigos oculares, que lo firmaron con su sangre, recibido en depósito por otros testigos, que nunca han dejado de darlo a conocer en toda la tierra, y por el que han muerto más mártires que letras tienen sus páginas?... Confieso que la majestad de los Evangelios me asombra: la santidad del Evangelio habla a mi corazón. Mirad los libros de los filósofos con toda su pompa, ¡qué pequeños son comparados con aquél!” El rasgo peculiar de la figura espiritual de san Jerónimo fue su amor apasionado por la Palabra de Dios, transmitida a la Iglesia en la Sagrada Escritura. El Papa Francisco nos invita acudir a la Biblia recordando que es un libro escrito bajo la inspiración del Espíritu Santo. 3) Para vivir San Jerónimo (340-420) se dedicó en Tierra Santa a traducir manuscritos antiguos de sus idiomas originales —hebreo, arameo y griego— al latín, traducción conocida como la versión Vulgata. Se convirtió en un profundo conocedor y apasionado divulgador de la Sagrada Escritura. Si bien, últimamente se ha descubierto la belleza narrativa y poética de la Biblia, san Jerónimo se dedicó a la Sagrada Escritura más que por gusto estético, para conocer cada vez más a Cristo, porque, decía, ignorar las Escrituras es ignorar a Cristo.

miércoles, 7 de octubre de 2020

EL TIEMPO DE LA VIDA ES BREVE

Raúl Espinoza Aguilera,

@Eiar51


El tiempo es un tesoro que se posee, pero es sumamente fugaz. Se nos escapa

como agua entre las manos; transcurre de una manera casi imperceptible.

Escribía el poeta Gustavo Adolfo Bécquer: “Al brillar un relámpago, nacemos y aún

dura su fulgor, cuando morimos: ¡Tan corto es el vivir!”

Esta reflexión me venía con ocasión que hemos entrado en el último trimestre del

año. Sin duda, un año especial por la pandemia.

Cuando miramos las fotografías de nuestra infancia y adolescencia con

compañeros de la escuela y la universidad, notamos el paso irreversible del

tiempo. Y tenemos que aceptar la edad con todas sus consecuencias.

Esto no lo digo para poner una nota dramática o negativa sobre esta realidad, sino

para asumir plenamente este hecho y llegar a una conclusión: aprender a

aprovechar bien el tiempo y sacaremos frutos jugosos.

Decía sabiamente el filósofo Séneca: “Apresúrate a vivir bien y piensa que cada

día es, por sí solo, una vida”. En este mismo sentido el pensador Gregorio

Marañón escribía: “La vida es nueva cada día”.

Dicho en otras palabras, es importante aprender a vivir con optimismo y ojos

llenos de ilusión cada día que vivimos. Siempre existen asuntos interesantes qué

aprender, metas valiosas para ponernos y luchar cada día por mejorar, aunque

sea en puntos concretos y pequeños.

El inolvidable Presidente de los Estados Unidos, Franklin D. Roosevelt, quien

lanzó el “New Deal” (“El Nuevo Trato”) una serie de medidas muy específicas para

buscar soluciones viables frente a la tremenda crisis económica, después de la

caída de la bolsa de 1929, Además, tenía una aprovechable convicción personal:

“En la vida hay algo peor que el fracaso: el no haber intentado nada”. Y fue un

Mandatario que se enfrentó a muchas incomprensiones y críticas, pero él siguió

adelante. Le tocó la difícil decisión de que su país entrara en la Segunda Guerra

Mundial a pesar de la frontal oposición ciudadana y de muchos otros políticos.

Recuerdo que tenía a un maestro en la Universidad de Navarra que habitualmente

estaba de buen humor, además de ser un erudito en su especialidad, era

amiguero, extrovertido y practicaba el excursionismo y otros deportes. Con

frecuencia me decía: “Vivir es algo maravilloso; no te la crees de tantas

posibilidades que tenemos para ser muy felices”. Y ésta fue siempre su norma de

vida.


Me viene a la memoria aquella célebre frase del pensador norteamericano Ralph

W. Emerson: “Graben esto en su corazón: cada día es el mejor del año”.

Considero que no le faltaba razón.

Tenía un tío de mediana edad -que ya falleció-, mientras que yo era un

adolescente, me decía muy convencido:

-¡Ya verás cómo se te pasa la vida! Primero te parecen largas las semanas y los

meses. Años después, te parecerá que las semanas se deslizan como un cuchillo

sobre la mantequilla; los meses y los años como un puñado de días. Luego te das

cuenta que la vida se te fue.

Y yo le decía:

-Con todo respeto, tío, ¿no estarás exagerando o dramatizando?

Me respondía:

--Ya lo comprobarás por ti mismo. Sólo deja que pasen algunas décadas. ¿Cuánto

tiempo hace que me casé con tu tía? Y ahora todas tus primas se han casado o

están por casarse y pronto seré abuelo. ¡Me parece increíble!

Cuando estudié Literatura y, dentro del Siglo de Oro Español, estudiamos los

textos de Calderón de la Barca, en su conocida obra de teatro: “La Vida es

Sueño”, me parecía desmesurado su planteamiento de considerar la existencia

humana como una ilusión, una fantasía, un efímero sueño. Pero con el paso de los

años le ido concediendo la razón.

El libro del Eclesiastés afirma con claridad, en Lengua Latina: “Tempus breve est”

(“El tiempo es breve”). Y esta realidad nos ayuda a espolearnos y escudriñar bien

el tiempo para sacarle el mejor provecho. Y concluyo con esta frase de un

conocido pensador de nuestros días: “Nadie lo hará tan bien como tú, si tú no lo

haces”.

ELVIS PRESLEY Y EL ROSARIO

Pbro. José Martínez Colín,

articulosdog@gmail.com

1) Para saber

El siete de octubre se celebra el aniversario en que los pueblos

cristianos en Europa pudieron detener la amenaza turca ante el

peligro de ser invadidos y destruidas sus ciudades e iglesias, como ya

había sucedido otros sitios. Fue en octubre de 1571 cuando el Papa

San Pío V pidió a todos los católicos que se unieran rezando el rosario

para pedir la intercesión de la Virgen María ante la batalla naval en el

Golfo de Lepanto, pues estaban en clara desventaja en proporción de

tres a uno. Las oraciones fueron escuchadas. Pudieron vencer y

detener el peligro inminente.

Por ello, el Papa designó el siete de octubre para festejar a

Nuestra Señora del Rosario y desde entonces la Iglesia dedicado el

mes de octubre al Santo Rosario. Además, para tener presente que la

Virgen María está siempre pendiente de ayudarnos en nuestras

necesidades y ha mostrado su poderosa intercesión en situaciones de

peligro, se añadió en las letanías, en aquel entonces, un nuevo título

mariano: “Auxilio de los cristianos”.

Con ese motivo, ahora el Papa Francisco invitó a ser fieles a la

costumbre de rezar el Rosario en las comunidades y, sobre todo,

recomendó rezarlo en las familias.

2) Para pensar

Es conocido que el llamado Rey del Rock & Roll, Elvis Presley,

estuviera influenciado por la música religiosa, llamada “gospel”, e

incluso grabó varias canciones e himnos al respecto. Sin embargo, es

poco conocido que cantara una canción sobre la Virgen María y el

Santo Rosario con una letra muy devota y respetuosa. La canción se

titula “El Milagro del Rosario”. Está incluida un álbum muy exitoso,

“Elvis Now!” del año 1971, que fue “Disco de Oro” en Estados Unidos.

En ese disco Elvis también interpreta la famosa canción de The

Beatles, “Hey Jude”.

La canción del rosario no fue propuesta para incluirse por la

compañía disquera, sino por el propio Elvis. La letra la escribió su

gran amigo, Lee Deanson, quien fue quien le enseñó a tocar la

guitarra. Lee se convirtió al catolicismo, muriendo en el año 2007. En


la lápida de su tumba se escribió: “Gracias una vez más por el

Milagro del Rosario”.

Pensemos qué lugar ocupa la oración del rosario en nuestra vida.

3) Para vivir

Como recordamos, cada rosario se compone de cinco decenas,

llamadas misterios. Primero están los llamados Misterios Gozosos;

luego los Luminosos (añadidos por San Juan Pablo II); le siguen los

misterios Dolorosos y por último los Gloriosos. Antes de rezar cada

misterio se recuerda brevemente un acontecimiento de la vida Jesús

y de la Virgen María. El Papa Francisco animó a meditar cada día “los

misterios de la vida de María a la luz de la obra salvadora de su Hijo”,

para hacerla partícipe de nuestras alegrías, preocupaciones y

momentos de felicidad.

Es bueno adquirir o no perder la costumbre de rezar el Rosario en

familia, pues como decía Benedicto XVI “la recitación de esta oración

constituye la cita diaria de vuestra familia, que crecerá así, gracias a

la intercesión de María, en la unidad y en la fidelidad al Evangelio”.